Relaciones comunitarias

Reconocemos la importancia de establecer sólidas relaciones con nuestras comunidades anfitrionas. Las relaciones sólidas que se construyen sobre la base de la confianza son vitales durante todo el ciclo de vida de la minería, desde la exploración y desarrollo hasta las operaciones y el cierre. Para nosotros, son una pieza esencial que contribuye a garantizar nuestra licencia social para operar.

El Comité de Seguridad y Sostenibilidad de la junta directiva supervisa las relaciones comunitarias. Como parte de sus deberes y responsabilidades, el comité revisa y supervisa los sistemas, políticas y actividades relativas a las relaciones comunitarias de la empresa a nombre de la junta directiva. Esto ayuda a garantizar el cumplimiento con las leyes, regulaciones y políticas aplicables puesto que tienen que ver con asuntos de relaciones comunitarias.

La participación de las comunidades es vital para nuestro modo de abordar las relaciones comunitarias. Nos proponemos involucrar a las comunidades locales tan temprano como sea posible en el ciclo de vida de la minería para construir una base sólida para las fases de desarrollo y operación de nuestros proyectos. Todos nuestros proyectos de desarrollo y operaciones cuentan con procedimientos para la participación de las comunidades locales que los grupos de interés pueden consultar. Basamos los programas en el diálogo constante y abierto para crear confianza y obtener feedback de los grupos de interés.

De manera similar, todas las operaciones llevan a cabo el EIA para los grandes proyectos y expansiones. Los EIA abarcan una extensa variedad de problemas e impactos potenciales, incluyendo asuntos ambientales, sociales y económicos. Los impactos potenciales los gestionamos mediante los planes de gestión respectivos.

Todos los EIA tienen cláusulas para la elaboración de programas detallados de supervisión continua a fin de medir, hacer seguimiento y gestionar los impactos. Dentro del proceso de los EIA se identifican los grupos de interés afectados en función del potencial y la gravedad de los impactos —tanto positivos como negativos— y se elabora un plan de participación para consultas. Con esto se asegura la participación de los grupos de interés locales en los procesos de aprobación.

En Puna Operations existen seis comunidades locales definidas como de ‘impacto directo’. Estas comunidades son las que están más cerca de nuestra operación y su infraestructura asociada. Se definieron otras ocho comunidades como de ‘impacto indirecto’. Aunque también nos esforzamos por involucrar a estas comunidades, hay menor posibilidad de que se vean afectadas por nuestras operaciones.

AEn Seabee Gold Operation se han definido cinco comunidades como ‘locales’ en función de su cercanía a la mina. Nuestros esfuerzos están mayormente dirigidos a fomentar la participación de estas comunidades.

En la mina Marigold no existe una definición formal de ‘comunidad local’ para fines de participación. En lugar de eso, identificamos las comunidades que incluimos para las consultas que forman parte de los requisitos de los EIA. Durante 2019, seguiremos trabajando para concretar la definición de ‘comunidad local’ en la mina Marigold.

En 2019 continuaremos con el desarrollo de una normativa y un sistema de gestión de relaciones comunitarias a nivel de empresa. Como parte del despliegue del sistema, todos los proyectos de desarrollo y operaciones desarrollarán una estrategia y un plan formal de relaciones comunitarias. También se incluirán mecanismos formales para quejas y reclamos como parte importante del sistema.

Por último, involucraremos aún más a nuestras comunidades anfitrionas dentro de la evaluación de materialidad de 2019. Con esto nos aseguraremos que las divulgaciones e informes públicos reflejen los asuntos más importantes para ellos.